lunes, 9 de julio de 2012


EN LOS ESCENARIOS DEPORTIVOS "EL CUERPO HABLA"
Escrito por: Jose Borda
El cuerpo tiene su propio lenguaje, es un idioma mudo, pero tan expresivo que comunica más que las palabras; dentro de un partido el 70% de la comunicación que tiene un árbitro de fútbol de salón con los jugadores y aficionados se produce en forma no verbal, el 25% restante son las palabras; y el 5% final corresponde al manejo del espacio interpersonal. Es un idioma mudo, pero tan expresivo que comunica.
Mensajes claros
Comunicarse con el cuerpo le ayuda a los árbitros a mejorar las relaciones con los jugadores y aficionados, con este tipo de comunicación unos y otros conocen que clase de persona tienen al frente. Cuando un árbitro llega a un escenario deportivo, en ese momento un gran número de señales se disparan de forma indirecta y comienza el intercambio de mensajes a través de gestos corporales y dependiendo como sean emitidas y recepcionadas, estas, provocan acercamiento o repudio.
Mantiene el equilibrio
El lenguaje corporal es la forma que tiene el cuerpo de comunicar lo que un árbitro piensa, de manera espontánea. Por eso es importante armonizar lo que se dice, lo que se siente con lo que se expresa; mantener el equilibrio entre estos tres aspectos aumenta las posibilidades de éxito en los partidos. Pensar, decir lo contrario y señalar una cosa diferente obstruye internamente y crea nudos emocionales que entorpecen el buen fluir de las relaciones árbitros, jugadores y aficionados.
Manéjelo bien
Para manejar el lenguaje corporal el árbitro debe conocerse, para ello debe observar lo que hace en los partidos y tratar de corregir sus movimientos, de igual forma debe establecer un buen contacto visual con los jugadores, lo cual es lo que más influye en la impresión que estos toman de él. El movimiento del cuerpo le sirve al árbitro para demostrarle a los jugadores cual es su posición frente a la de ellos, si lo ven erguido, seguro y firme al señalar van a entender sus instrucciones. Por último es conveniente hacer pocos gestos o hacerlos sobriamente con esto se demuestra control emocional y control del partido.
Comunicación satisfactoria
Los mensajes con el cuerpo surgirán siempre de las propias características de los árbitros, de su autoestima, cuando el árbitro se siente a gusto con lo que hace, con los partidos que le asignan, con la asociación que representa, eso es lo que manifiesta. Los árbitros que saben quiénes son, que pueden dar y para donde van, se muestran, actúan con soltura en los campos y siempre se comunicaran a través de su cuerpo satisfactoriamente con los jugadores y aficionados

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