viernes, 24 de mayo de 2013


ABANDONAR SI ... FINALIZAR NO.

La regla catorce, en los poderes que tiene el árbitro afirma que un silbato podrá interrumpir, suspender o abandonar un partido por cualquier tipo de interferencia externa, e interrumpir, suspender o abandonar un encuentro cuando lo juzgue oportuno en caso de que se contravengan las reglas de juego.

Se reanuda otra vez

Interrumpir hace referencia a “parar” el partido momentáneamente, por ejemplo, al cometerse una falta o infracción sancionable con tiro libre y reanudarlo nuevamente con la ejecución de este; suspender se refiere a “detener” el partido a causa de alguna interferencia externa como la falta de luz, factores climáticos etc, en este caso el partido tardará más en reanudarse, pero aunque se demore siempre continuara.

Otros deciden

Para definir la tercera palabra me di a la tarea de investigar cuál era la razón de esta “ trasformación” y se llegó a lo siguiente: “el árbitro sólo podrá terminar o finalizar el partido una vez cumplidos los 40 minutos, nunca antes, por lo demás sólo lo podrá interrumpir o suspender; la finalización en los casos mencionados anteriormente, es solo decisión de una autoridad competente diferente”.

¿Descontinuar o abandonar?

Determinar si el partido se da por terminado con el resultado obtenido hasta el momento que el árbitro lo descontinuó, se juega de nuevo, o se continúa, es una decisión que solo le corresponderá a la organización, más no al árbitro. "En estos casos el silbato solo deberá informar a las autoridades respectivas la razón o razones y ellos tomarán la determinación de acuerdo a lo estipulado en en el Reglamento de la Competición”. De ahora en adelante no finalice los partidos dando tres pitazos y moviendo los brazos, simplemente lo descontinúe retirándose del terreno de juego e informe lo que paso, pues ya conoce la diferencia.

Escrito en original por José Borda para www.revistaarbitros.com

MANUEL PÉREZ LIMA: 
directrices para ser un buen árbitro

Muchos colegiados se quedan en la monotonía, en lo fácil, en lo común. En las siguientes líneas te recomendaré una serie de puntos para salir de esa corriente en la que se quedan muchos buenos árbitros, para llegar a las cotas más altas de este bonito deporte, el arbitraje.

Al terminar una conferencia o cuando charlo con algunos compañeros, la pregunta que con mayor frecuencia me hacen es la misma, y se repite constantemente, ¿qué podemos hacer para llegar al profesional? Me sorprende mucho que la gente piense más en llegar al Profesional, que en preocuparse en hacer deporte. Todos quieren que les diga la pócima mágica para conseguir llegar a la cima.

En las próximas líneas voy a intentar desgranar todos los ingredientes, y el tiempo de cocción necesario para que esta mezcla nos pueda ayudar a conseguir nuestros objetivos, llegar al Profesional, o disfrutar de este maravilloso deporte que es ser árbitro de fútbol de salón.

Hay que centrarse solo en la parte deportiva y escapar de todo lo demás

Tenemos que olvidarnos de los tópicos, si se fijan últimamente estamos oyendo en las delegaciones o foros de árbitros la siguiente frase: hay que pasar desapercibido. Esa forma de arbitrar agradando a todos, pasando la mano por arriba a los jugadores, permitiendo todo tipo de cosas, crear vestuarios que no están ni para criar animales, tarjetas que se sacan y no se ponen en el acta, permitir personas no autorizadas en vestuarios y banquillos, “hablar con compañeros de temas extra-deportivos que sólo consiguen anularte”, pensar que se logra más en las delegaciones que en los terrenos de juego, hablar mucho y trabajar poco. Hay que concentrarse sólo en la parte deportiva y olvidarnos de todo lo que no sea nuestro cometido, de todo lo innecesario.

Lo primero que aprendemos como árbitros es a dirigir encuentros de fútbol de salón en categorías inferiores. Después de unas clases y algún consejo por parte de los más veteranos, sacamos los partidos bien sin problemas, incluso nos dicen que lo estamos haciendo bien, ya controlamos la zona que yo denomino “no problem”.

Una vez que tenemos dominada la zona: “No problem”, hay que perder el miedo a salir de esta área, hay que dejar de ser unos vagos y apostar por cambiar de marcha, nos solemos quedar en la zona “no problem”, porque la tenemos dominada, nos sentimos seguros y tenemos pavor a los cambios.

La zona ''no problem'' es la zona segura y de aprendizaje

Dar un paso más significa que hay que asumir riesgos, buscar nuevos retos, nos vemos forzados a cambiar de rumbo, a orientar nuestra voluntad hacia la motivación por mejorar y asumir la valentía de dirigir los encuentros con mayor rigor, llegando donde los demás no quieren intentarlo por temor a perder lo conseguido o por comodidad. Es fundamental cambiar la actitud y pasar de ser árbitros saca partidos, a árbitros de fútbol de salón de máximo nivel. Podemos utilizar la zona “no problem” como aprendizaje y una vez controlada dar un paso más allá.

Hay que esforzarse en cada partido, sea un alevín o uno del torneo profesional, tenemos que mejorar nuestro rendimiento, mejorar el nivel, crecer, poniendo toda la voluntad y estar motivado para darlo todo, estar por encima y demostrar en cada partido la categoría que figura en nuestro carnet como colegiado, ésta se demuestra en el terreno de juego dándolo todo en cada momento.

Concentración máxima, evitando ser conformista, demostrando en cada momento que queremos ser más grandes, no solo en los partidos, también en los entrenamientos, las clases, etc... Siempre intentando salir de la zona de “no problem” y buscando nuevos retos.

Si estamos arbitrando un partido aburrido, sin juego, sin tensión, antes de permitir contagiarnos del encuentro, nos pellizcamos si es necesario para conseguir recuperar la concentración, y empezar a corregir nuestros puntos débiles, haciendo la diagonal, acelerando, llevando siempre el balón a la derecha, siempre buscando una mejor posición. Y es que una simple jugada que nos coja con la guardia baja, nos puede tirar lo conseguido hasta el momento. En un partido no hay lugar para la distracción.

Los partidos sin juego ni tensión los podemos utilizar para corregir puntos débiles

Estamos en un momento delicado, no pretendo que nadie haga cosas que no quiera hacer, y mucho menos ofender a algún compañero, pero lo queramos o no, muchos árbitros se quedan en la zona “no Problem”, y no arriesgan, están dejando pasar una oportunidad magnífica para aprender a darlo todo en cada momento, ya sea en un partido, entrenamiento, o un examen. Independientemente de la categoría que tengas en este preciso momento, es mejor arriesgar y dar un paso hacia delante, que quedarte corto con la mediocridad y la vagancia, con las que no vamos a ninguna parte.

Los árbitros tienen cierto reparo en hacer cosas diferentes, es mucho más cómodo seguir la corriente de la mayoría, pero os puedo asegurar que realmente lo mejor que te puede pasar en este deporte es cuando sales de la normalidad, de la comodidad de dirigir un encuentro lejos de la jugada, intentando convencer a los jugadores con diálogos, comportándote como si fueran tus amigos. Cuando asumes la valentía de darlo todo en cada partido te ganas el respeto de los jugadores, aficionados y de tus dirigentes, que verán en ti un candidato a subir de categoría. El respeto se gana con tu trabajo sobre el escenario deportivo.

Creo mucho en este deporte que tantas alegrías me ha dado, como es el arbitraje, no sólo por el simple hecho de hacer deporte sino por los valores que nos transmite desde que decidimos hacernos colegiados; tener tranquilidad en situaciones límites, ser solidario, ser justo, tener lealtad, respeto hacia los demás y así mismo, cooperación, autonomía, participación, tolerancia e integración, valores esenciales que nos ayudarán no sólo como deportistas sino para afrontar nuestra vida.

Para mí el árbitro de fútbol de salón es una mezcla entre un corredor de 800 metros y un especialista en reglas de juego. ¡A qué esperas, cambia de marcha y sal de la zona “no problem”!

domingo, 12 de mayo de 2013

Para todas las madres del mundo, nuestra Corporación Arbitral les desea un Feliz Día que estén rodeadas de sus hijos y que compartan momentos agradables... recordando que el día de la madre son todos los días, ademas de aprovechar la compañía con la mujer que da todo y no pide nada a cambio entregando sacrificio y desvelos lo cual no tienen precio...
Y, para aquellos que la han perdido les decimos que ellas viven en sus hijos y siempre están presentes en nuestras vidas por eso y mucho mas... Feliz día de las Madres!!!




sábado, 11 de mayo de 2013

LAS DIFERENTES MANERAS DE APLICAR EL REGLAMENTO

Aunque el fútbol de salón es un deporte que se juega en todos los países del mundo, se rige por un mismo reglamento y lo practican igual cantidad de jugadores en cada partido - no es similar en todos lados - pues tiene muchas diferencias de forma, incluso cuando lo practican en un determinado país.

Varias diferencias
La diferencia del fútbol de salón radica en que cada región tiene una cualidad especial que lo destaca, en algunos casos sobresale por ser más rápido, en otras por ser más táctico, más aguerrido o más grupal, en fin varios son los factores que determinan estas “diferencias”. Tal disparidad también se encuentra en los equipos que participan en competiciones internacionales, el fútbol de salón, que se juega en Rusia es distinto al que se juega en Brasil y el futsalon que se juega en Asía difiere del que se practica en América, sólo para poner dos ejemplos.



Interpretar a qué se juega
Siempre lo que los jugadores esperan de cualquier silbato es que sin importar su procedencia, la comprensión hacia el futsalon sea similar a la de sus colegas, es por esto que se hace de vital importancia que el árbitro o los árbitros modernos interpreten a qué está jugando cada equipo, la forma del juego, los planteamientos tácticos, las jugadas preparadas o preestablecidas por los técnicos de cada equipo y por supuesto la idiosincrasia de los deportistas, de lograrlo las cosas dentro de los partidos se le facilitarían enormemente. Desde este punto de vista, sólo cuando el árbitro consigue comprender estas diferencias se dice que conoce las diversas mentalidades salonisticas que se presentan en una competición.

¿Cómo desarrollar esta cualidad?
A raíz de esto surge el interrogante ¿Cómo pueden los árbitros desarrollar este aspecto? “los árbitros pueden desarrollar esa cualidad respirando fútbol de salón continuamente, como hacen los jugadores y los entrenadores”, sólo así podrán entender la diferentes mentalidades salonisticas; tendrán que ver muchos vídeos y juzgar las disimilitudes que se presentan dentro del fútbol de salón”. Conocer esta técnica requiere de una enorme capacidad, inteligencia y habilidad conductiva del árbitro.

Aprenda a distinguirlas
En los curso, capacitaciones o seminarios se imparten sesiones teóricas, durante las cuales se observan vídeos de situaciones procedentes de las distintas zonas, países o confederaciones según sea el caso, de acuerdo al nivel los mismos los silbatos podrán comprender cada una de las diferencias del futsalon, ya sea de un estado a otro, de un país a otro o de una Confederación a otra. De esta manera el árbitro preverá y aprenderá a distinguir las diferentes culturas salonisticas en todos los aspectos posibles. El futsalon moderno posee diversidad de mentalidades salonisticas las cuales usted deberá conocer para realizar mejor su trabajo.

Tomado y escrito en original por José Borda para www.revistaarbitros.com.

miércoles, 1 de mayo de 2013


LA FALTA DE GARANTIAS
La falta de garantías para un árbitro, comprende aquellas acciones, conductas o situaciones que realicen los jugadores, cuerpos técnicos o integrantes de las barras y que no le permitan el correcto desempeño de su función dentro de un partido de fútbol de salón. Como su nombre lo indica, es cuando el árbitro no encuentra las condiciones para desempeñar su labor de acuerdo a lo estipulado en el reglamento. Les sirven a los mismos para conseguir ejecutar los procedimientos y disposiciones establecidas en las reglas de juego.

¿Porque se implementan?   
Se establecen en los reglamentos de competición exclusivamente. Al estar implementadas en estos, los participantes de cualquier competición están de acuerdo y se someten a lo estipulado en cada torneo en particular y al negarse incumplen dichos compromisos, es decir eluden sus responsabilidades; con este recurso, los jugadores, equipos o barras se abstienen de realizar acciones que vayan contra el juego limpio tanto en el presente y sirve de correctivo para el futuro. Dichas circunstancias deben brindarlas todos y cada uno de quienes se encuentran alrededor de un partido de fútbol incluyendo el personal encargado del juzgamiento.

Soporte legal
El árbitro puede hacer uso de este recurso basándose en algunos de los poderes que le da la regla Nº 6 y 14 como; hará cumplir las reglas de juego; interrumpirá, suspenderá o abandonará el partido cuando lo juzgue oportuno, en caso de que se contravengan las reglas; interrumpirá, suspenderá o abandonará el partido por cualquier tipo de interferencia externa; tomará medidas disciplinarias contra jugadores que cometan infracciones merecedoras de amonestación descalificacion o expulsión; tomará medidas contra los funcionarios oficiales de los equipos que no se comporten de forma correcta y podrá, si lo juzga necesario, expulsarlos del terreno de juego y sus alrededores, entre otros.

Para usar este recurso
El personal encargado del juzgamiento puede hacer uso de este mecanismo cuando haya agotado todos los recursos disciplinarios, técnicos y de persuasión, en ningún caso podrá aplicar la “falta de garantías con los jugadores” cuando no haya tomado inicialmente recursos disciplinarios, también podrá hacerlo en aquellos casos en que alguno de los participantes fallezca o le provoquen una lesión de consideración que necesite atención medica especial y cuando sea agredido uno o varios integrantes del equipo arbitral, en esta caso especifico es el arbitro líder el encargado de valorar la violencia de la agresión.

Ejemplos variados
Estas conductas o situaciones van desde, que un jugador se rehusé a obedecer la orden de una arbitro, hasta la interferencia directa del publico sobre el juego y las agresiones sobre los integrantes del cuerpo arbitral, otros ejemplos son la interferencia de los espectadores en el partido, las peleas en tribunas o a cualquier problema entre ellos; la negativa de uno o los dos equipos a aceptar las decisiones del árbitro y el permitir o no a una persona, estar presente en los alrededores del escenario deportivo y el banco técnico y esta se niegue a retirase cuando el árbitro lo ordene. 
Escrito por Antonio Pulido para revistaarbitros.com